Juan habla en sus tres cartas, como en el Evangelio, de la “comunión” que debe existir entre todos los cristianos. Cada Iglesia y cada reunión deben permanecer abiertas a otras personas, manteniendo asociaciones constantes con ellas. Bienaventurado el hombre que de ellos tiene llena su aljaba; no será avergonzado https://jacky479bfj7.blogpixi.com/profile